lunes, 17 de febrero de 2014

ME "HE LEVANTADO" CON JOSÉ LUÍS PERALES

No ha aparecido en todo el tiempo hasta que mi cuerpo ha llegado al despacho  y no sé todavía cómo .
A tientas he buscado mi silla "tio-vivo" en  mi pequeño cubículo oficinístico y cual resorte he empezado a cantar: ...

"Y TE HAS PINTADO LA SONRISA DE CARMÍN..Y TE HAS COLGADO EL BOLSO QUE  TE REGALÓ... Y AQUEL VESTIDO QUE NUNCA ESTRENASTE, LO ESTRENAS HOY; Y SALES A LA CALLE, BUSCANDO AMOR..."

No he dejado de repetir el estribillo. Se lo he cantado a mis compañeros de trabajo cuando pasaban por mi lado y ellos tarareaban la canción, algunos se han atrevido inclusive a canturrear alguna estrofa completamente solidarios a mi causa. 
 
Debo ser una auténtica "friki" que padece nostalgia de épocas pasadas. Es mi madre, es ella la que nos ha hecho sentir amor por la música, LA SUYA, claro. 
Tenemos un repertorio que va desde FORMULA V, pasando por MOCEDADES, ROCKY SHARPE, MARISOL, y mis ídolos DÚO DINÁMICO... un sin fin de personajes fabulosos. 

Pero os aseguro que tanto Mocedades y José LuÍs Perales tuvieron un principio activo en mi vida y en la de todas las compañeritas de mi clase; me arriesgaría a decir que en todos los colegios de curas y monjas ¿Por qué? Porque eran los cantantes más socorridos a la hora de tocar la guitarra.

 Es como la canción de Sting y su "Every breath you take" trillado hasta la muerte en las clases de Inglés; esa y la de " My name is Luca. I live on the second floor" de Suzane Vega. Canciones de ritmo armonioso y fácil pronunciación.

José Luís, José Luís...tú y "TU BARCO LLAMADO LIBERTAD" me molaba eso de "UNA CAMISA, UN PANTALÓN VAQUERO.. Y UNA CANCIÓN, LAILA, LA; LAILA LAAAA" mi imaginación recurría siempre a un chico como los de los  anuncios de coca-cola de aquella época, ja, ja, ja. 

Me saltaban las lágrimas con la canción de "NAVIDAD ES NAVIDAD, TODA LA GENTE SE ALEGRA, Y SE ENTRISTECE LA MAR" pero me sobrecogía la frase"NOCHES BLANCAS DE HOSPITAL".

Capítulo a parte dejo encima del altar la estrofa "TE QUIERO, TE QUIEROOOOOO, Y ERES EL CENTRO DE MI CORAZÓN" otro de sus mejores temas.

No puedo evitar sonreír con "Y QUIÉN ES ÉL...EN QUE LUGAR SE ENAMORÓ DE TI" Valiente cansino que no hace más que preguntar mil veces lo mismo, que torpón, ja, ja, ja. Los cuernos se le veían venir de lejos. Porque otra cosa no, pero este chiquito (J.LPerales), guapo, lo que se dice guapo, no era ni lo será. Pobrecito mío José Luis, y encima lo empeoraba con sus dotes escénicas para interpretar la canción. Era melodramático en sus temas tristes poniendo unas muecas extrañas que te llevaban incluso al borde de la lágrima; y ñoño tirando a "plumaje de pavo real" en las canciones románticas. Creo sinceramente que es de los canta-autores que es mejor "escuchar sin ver"; eso sí TODO UN POETA, un compositor excepcional al que muchos cantantes tienen que agradecer algunos de sus grandes éxitos "adoptados".

GRACIAS JOSÉ LUIS, VA POR TI  MI SONRISA DE CARMÍN









jueves, 16 de enero de 2014

MI BLOG ANIMADO


LOS HUECOS DE TU CUERPO



Me encantan tus huecos, los espacios que recorren tu piel. 

Me encanta acurrucarme en ellos. 

Me gusta la forma que insinúan. 

El calor que desprenden... 

 Esos espacios que pasan desapercibidos pero que son indispensables para amarte. 

Fuentes de cariño, de reposo, de descanso para mis lágrimas, de besos dulces y de amor sincero. 

No hablo de sexo, ni de  pasión desenfrenada, no hay locura; sólo ternura, contemplación, placidez y admiración. 

Me gusta recorrerte con la mirada, rozarlos con mis dedos, contemplar como las palpitaciones de tu corazón se intuyen en tu piel y se acompasan con el mío; El hueco que forma tu cabeza inclinada descansando sobre la palma de tu mano es mi refugio favorito. Me da inmenso placer, tranquilidad  y calor.

Mis manos recorriendo los huecos que forman tus costillas, poco a poco suben y se hunden en los espacios que dejan tus clavículas al desaparecer. 

Me deleita donde acaba tu cuello, el lago de sensualidad que se forma en su terminación donde queda el agua derramada y el sudor del esfuerzo, la lluvia de los días grises o de las duchas al amanecer

El hueco posterior de tus rodillas y la curvatura que realiza  tu espalda donde llega a su fin. Me gusta que mis dedos se pierdan en los huecos de los tuyos y sentir como me abrazan y me cogen con fuerza para no dejarme caer, posesivos, seguros, confiados.

Me voy arriba, me voy al suave hoyuelo  que forma tu barbilla cuando tu semblante está serio y que desaparece al sonreír y subo por la curva que hace tu cuello hasta la nuca, y aparezco en la hendidura deliciosa  que forma tus labios al estar cerrados, suaves, apetecibles y llego por fin a tus ojos que me conquistan y se funden con mi mirada. Me gusta el recorrido que envuelven esos ojos preciosos y sonríen simultáneamente con la boca cuando me miran.
 Por todo eso y mucho más, amo tus huecos.