LA CULTURA DEL CHORICEO

¿Pero qué está pasando? Esto es inaudito. ¡Nos están robando ante nuestras propias narices (válgame la redundancia)! ¡No doy crédito!

Sé que “chorizos ha habido toda la vida de Dios e imagino que esta especie repugnante  no desaparecerá nunca pero… ¡Tantos, tantos, ESTO ES UNA EPIDEMIA!

No me caso con nadie, ningún partido político, ningún emblema ni bandera.

Antes escuchabas algunos escándalos sonados, como: Roldán, Mario Conde, El Dioni, etc. No sé, quizá esos “choriceos” o “chorizones” los veía más organizaditos en el tiempo, más distanciados. ¡Ahora es terrible, parece que roban todos al mismo tiempo!!! ¿Habrán sincronizado los relojes?

Estamos en una de las situaciones económicas más críticas a nivel nacional, internacional y mundial; y los chorizos nos están creciendo como setas! Y no, no penséis que es por la “maldita crisis” porque señores míos, esta gentuza lleva robando hace mucho tiempo.

Pienso…. ¿Qué pasa, que cuando entran a formar partede la clase política, en fundaciones, en bancos; en empresas u organizaciones públicas, etc.les regalan un carné de “chorizo”? Si, ya sé que no son todos los que hay, pero los que no lo son… ¿Queréis decir que nadie se entera de los “trapicheos del otro? Porque no me lo creo. El mundo es bien pequeño y al final se acaba sabiendo todo.

Creo que lo que más me indigna es que una vez “cazados”, no devuelven los millones robados!!!!! ¿Dónde queda ese dinero?

Nos están bajando los sueldos, familias enteras sin trabajo y viviendo en la indigencia o de la generosidad y caridad del prójimo; la sanidad comprometida; la educación perdida y el coste de la vida por las nubes;  y éstos caraduras, roba que te roba ¡JODER! (perdón) ¡No hay derecho!¡ RUINES, MISERABLES Y LADRONES! Y aún van con la desfachatez de que no han hecho nada malo y aguantan la mentira hasta que al final no pueden rebatirla porque las pruebas son irrefutables.

¡No me alcanza la cabeza a imaginar tal cantidad de millones! Es que no hablamos de uno ni de dos, ya estamos rondando los 22 millones de euros. ¡No se andan con chiquitas!

Me avergüenza la falta de honradez,  la falta de escrúpulos, la desaparición de la dignidad humana;  el robo despiadado, de la picaresca repugnante. ;Me avergüenzo de que personas como estas existan en la sociedad. CHORIZOS DE TODA LA VIDA

MANZANAS PODRIDAS DE LA SOCIEDAD