Creo que últimamente no hago más que conocer “ERE” (Expediente de
regulación de Empleo). Lo conocen mis amigos, mis padres, mis primos mis tíos
y sorprendentemente MILES DE PERSONAS que desconozco.
¿Será una moda nueva? ¿Un
género musical rompedor? ¿La última bebida refrescante?
No señores, es una
liquidación en toda regla. Un EXTERMINIO de cabezas trabajadoras que se ha extendido entre muchísimas empresas como una epidemia porque no pueden
afrontar las pérdidas y la falta de ingresos. Un cáncer mundial.
Me es difícil intentar colocarme en ambos lados de la balanza porque
lamentablemente cada empresa es un mundo y las situaciones son realmente
“jodidas” en ambas posiciones, tanto
para el empresario como para los trabajadores. Pero yo, señores, soy un
asalariada y como asalariada escribo.
Dentro de la empresa el cariz toma distintas caras. Ya se sabe que siempre
hay disparidad de opiniones y que hablando en “plata”, todo el mundo va a
“salvar su culo”. Esta situación se podría decir que es similar a la de la
muerte (exagerando un poquito), porque VAS SÓLO. Por más que se formen
grupos, sindicatos, abogados, mesas de negociación y miles de alternativas, AL
PARO VAS SÓLO, cómicamente acompañado de miles de solitarios como tú que
aumentan los índices de desempleo.
Estás sólo ante la incertidumbre del futuro; ante lo que supone mantener
una familia sin trabajo, un alquiler, una hipoteca, los colegios, el seguro
médico…hasta al perro.
En estas situaciones eres capaz de sacrificar todo con tal de mantener el
puesto de trabajo si es posible. Reducirías parte de tu sueldo; incrementarías
tu jornada laboral cobrando lo mismo o a la inversa, menos horas cobrando
menos. (De hecho, todo esto ya lo estamos padeciendo de forma obligatoria) Incluso
serías capaz de desaparecer durante 6 meses, apuntarte al INEM en pro de que
continúe tu mesa de trabajo cuando
vuelvas y no te encuentres a la vuelta una pancarta en la que se lea ¡Gracias
por haber participado! ¡CHIM PUM!
He podido comprobar lo que la gente es capaz de hacer. La solidaridad
interesada, la violencia verbal gratuita; el miedo y la desesperación. He visto
compañeros maltratándose por disparidad de criterios cuando llevaban muchos
años siendo amigos. He visto humillaciones, grupitos haciendo cávalas con los
posibles despedidos; situaciones rastreras; incomprensión, crueldad; egoísmo
puro y duro; lágrimas, consejos, abrazos, propuestas desesperadas, faltas de respeto por ambos lados. Y todo eso sabiendo que
pasamos más tiempo con nuestros
compañeros de trabajo y jefes que con nuestras propias familias(a veces, por
desgracia).
Los “amigos” pasan a ser enemigos y la desconfianza campa a sus
anchas; y a los que admirabas, caen en picado por los suelos.
Debo decir en honor a la verdad que también he
visto uniones entre compañeros que te enternecen el corazón; empresarios que
empeñan todo lo que tienen para intentar reflotar el Titánic; amistad; “mosqueteros” impotentes que van todos a una. Sufrimientos extremos por
ambas partes, bondades; sacrificios en pos de salvar la mayor cantidad de gente
posible. Respeto, compañerismo; pancartas; unión de trabajadores que donan parte de
su sueldo para que se mantengan muchos otros.
¡QUÉ LÁSTIMA DE SITUACIÓN!
He visto, he oído y conozco familias enteras en la que todos los miembros
están sin trabajo.
Parece totalmente absurdo, una “puta
tragedia” sin vistas a resolverse en un futuro próximo.
Me pongo las pilas por aquello de las “barbas del vecino”…
Miro las escasas ofertas que me aparecen por internet antes de que me
llegue la “muerte súbita” (Hay que ser
prevenido) y Dios! Increíble, te piden mil cosas: 20 idiomas escritos y
hablados cual nativo. El inglés ya no es suficiente, si incluyes el chino,
igual incluso tienes algo de suerte; miles de programas ofimáticos que no has
escuchado en tu vida y otros que no utilizas habitualmente; una responsabilidad
de “machaca”.
Condición indispensable: espíritu dinámico (¡para dinamismos está la gente), innovador y
que te encante trabajar en equipo.
La parte más demencial es aquello de 6 meses
de prueba que si no los pasas, en dos meses te echan sin indemnización y si tienes la suerte de pasar...ya si eso…luego decidimos si sigue Usted con nosotros.
El toque de gracia es el de disponibilidad de viajar: ¿Te irías a vivir al
Congo Belga por 3 años?La estocada mortal: el sueldo, ¿paupérrimo sería
la palabra idónea?
Al final no sabes si acabas cobrando
más en el paro que trabajando. Yo a veces creo que pago por trabajar: coche,
gasolina, buses, metros, comidas, etc. Mi problema es que me encanta trabajar,
me siento útil, me hace feliz, me gustan los retos; mi cabeza se mantiene
despierta, creo nuevas cosas y soluciono situaciones complicadas; me mantiene
activa, preparada y enriquezco mi experiencia profesional, mental y de alma.
NO ESTÁ TODO PERDIDO, HAY QUE SER OPTIMISTA Y NO PERDER LA ESPERANZA. NO HAY
MAL QUE DURE 100 AÑOS PERO MIENTRAS TANTO…
¡QUÉ DIOS NOS COJA CONFESADOS! ¡Y QUE NO ME CONTAGIE EL ERE!
PROXIMAMENTE… "UN AÑO EN PARO SIN FIN" O "PUTO PARO"
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